¿Influye el cine que vemos en la forma en que vivimos nuestra sexualidad? Probablemente la respuesta sea positiva, en mayúsculas y con signos de admiración: ¡SÍ!
Más allá de servir como disparadores de ideas para ampliar horizontes, proponer juegos o hacernos reflexionar sobre nuestros propios instintos (¿por qué “bajos”, si se sienten como los más altos?), las películas en las que lo sexual juega un rol esencial son, en muchos casos, fuentes inagotables de estímulos. Valen como ejemplo los cuatro títulos que este mes forman parte del especial A la cama con AMC, cuyas cualidades estimulantes desafían la entereza de cualquiera. Para celebrar estas películas, te proponemos un ranking de sus escenas más calientes, un Hotmometro, que va desde lo muy caliente hasta la explosión total. En las sabias palabras de aquella canción pegadiza:“Fuego, mantenlo prendido. ¡Fuego!
4) Cercana obsesión, dirigida por Rob Cohen (2015)
“O de cómo la seducción puede escalar a la locura extrema”, podría ser el subtítulo de este thriller erótico cuya clave es el protagonismo de la siempre espectacular Jennifer Lopez, aquí subyugada por los abdominales, músculos y belleza de Ryan Guzman, que interpreta a un adolescente que ha tomado toda la sopa. Tras su separación, Claire intenta sostener una amigable relación con su ex, mientras ambos siguen muy involucrados en la crianza de su joven hijo. La entrada en escena de Noah, el vecino hot de la puerta de al lado, será lo que encienda la mecha: juegos de miradas, roces, un poco de voyeurismo y la atracción de lo prohibido. De manera inevitable, algo sucede entre Claire y Noah ¡y no es nada inocente! Si buscan una escena de sexo caliente, sensual y con pregnancia, aquí la tienen. Ayuda bastante la belleza extrema de esos cuerpos. ¡Acercarse con precaución!
3) Magic Mike, dirigida por Steven Soderbergh (2012)
Tras más de un siglo de poner al cuerpo femenino como objeto supremo de deseo fílmico, era hora de que aparezca su contracara, la total, absoluta y desenfadada sublimación de lo apolíneo o, para ponerlo sencillo, el éxtasis extremo que proponen los cuerpos en combustión de los strippers masculinos que hacen de Magic Mike una fiesta para los sentidos. Hay para elegir: Channing Tatum, Alex Pettyfer, Matt Bomer, Joe Manganiello, hasta Matthew McConaughey, si lo que buscas es un cuerpo maduro, pero igual de tentador. Aquí no hay coreografía que falle, pero si tenemos que elegir una porque nos obligan, está claro que el Hotmometro se detona cuando el Mágico Mike sube al escenario solo: el sensual contoneo que se transforma en sexual despliegue en plan B-Boy, habla de un cuerpo que sabe lo que hace. Sí, la trama está basada libremente en experiencias vividas por el propio Channing y su vida previa al estrellato, cuando trabajaba de stripper en Florida, bajo el seudónimo Chan Crawford. Sus ardientes performances lo llevaron a participar del video musical “She Bangs”, de Ricky Martin y de allí a la pantalla grande donde, de forma circular, vuelve a su vieja profesión en la piel del stripper definitivo: basta con no perderse Magic Mike, para comprobarlo. ¡En llamas!
2) 50 Sombras de Grey, dirigida por Sam Taylor-Johnson (2015)
Tarea difícil si las hay, elegir una sola escena de esta primera parte de la trilogía que arrasó en librerías, salas de cine y canales como el nuestro ¿La de la corbata? Paradójica: una escena sin ataduras en las que todo pasa, precisamente, por el delicado arte de atar. ¿La del cubo de hielo? Imposible no derretirse cuando lo helado se transforma en algo tan caliente. ¿Alguna escena en la habitación roja del dolor? Quizás no sean las más sexies, pero sin duda son las más jugadas, no sólo por su flirteo con lo explícito (que no son las únicas) sino por el nivel de entrega y dedicación de sus protagonistas. Pero la ganadora es la primera escena de sexo entre Anastasia Steele (Dakota Johnson) y Christian Grey (Jamie Dornan) ¿El motivo? Porque si entendemos el sexo como un todo, el juego de seducción previo es parte esencial y para una película a la cual no llegan espectadores desprevenidos (todas y todos sabemos de antemano por dónde va la cosa), que el primer encontronazo sexual entre sus protagonistas suceda a los ¡40 minutos! es digno de aplaudir: a esa altura es imposible no estar al rojo vivo. Finalmente, la escena está a la altura de las expectativas: llamarada total, sin ponernos descriptivos. Sí, la primera parte de la trilogía Grey, basada en las novelas de E. L. James, cumple con su premisa. ¡Y lo hace con creces!
1) Bajos instintos, dirigida por Paul Verhoeven (1992)
Imposible no ubicar en el primer lugar del podio hot a una de las películas más iconográficas del género, el acabose absoluto de seducción, placer y… asesinato, que lo transforman en el thriller erótico por excelencia. Claro que la responsabilidad está dividida entre la mano experimentada de Paul Verhoeven, quien desde sus comienzos supo hacer del sexo un elemento tan caliente como perturbador, el guion de Joe Eszterhas (escriba de películas hot como Flashdance y Showgirls, también dirigida por Verhoeven) y, sobre todo, los protagónicos de Michael Douglas y Sharon Stone, cuyo cruce de piernas ya es más que legendario. Sí, la escena que elegimos para gobernar el Hotmometro es la del interrogatorio que lleva adelante el detective Nick Curran a su principal sospechosa, la escritora Catherine Tramell, una Stone que nos deja de piedra por sus artes seductrices: peligrosa, tentadora, provocativa como pocas, Catherine sabe cómo hacer para encender los más bajos instintos de quien sea. ¡Y dejarse llevar, sin dudarlo! Un consejo: si no la vieron, no se la pierdan y si lo hicieron, saben que tienen que volver a hacerlo. Eso sí, que sea con un matafuegos a mano. ¡Lo van a necesitar!